"Si hoy hubiera mayoría para aprobar la ley en general y se plantearan modificaciones se vuelve a la Cámara de Diputados, que es la revisora, y allí dificilmente el oficialismo tenga la mayoría para insistir en el proyecto original".
"Si la ley se aprueba a partir del 10 de diciembre el nuevo Congreso puede volver a tratar esta ley e incluso derogarla y dictar una nueva, nunca debió tratarse antes de esa fecha porque debió ser producto del consenso y no de la arremetida".
"La Presidenta podría betar modificaciones pero eso tendrá un costo político muy importante. Tengamos en cuenta que esto forma parte de un operativo para tratar de lograr la reelección de Kirchner en 2011 y tengamos en cuenta que tiene una imagen bajísima, todo es un montaje para armar la influencia de Kirchner en algunos medios, este es el propósito mezquino de esta ley desde el punto de vista político".